No hay nada como enseñar al público lo bien que se llevan entre los profesionales de cada programa en una cadena de radio. Queda muy bonito. Así se muestra el buen rollo que existe o debe existir en una empresa, pero ya sabemos que si en las que trabajamos persisten los grupos aislados no es de extrañar que en una emisora exista también ese ambiente en el que algunos se puedan llevar a matar o que simplemente no se lleven. Para demostrar el buen ‘feeling’ existe un espacio entre la finalización de un programa y el comienzo de otro para que los presentadores interactúen demostrando que al menos entre ellos no hay problema alguno. Y de paso conseguir algo del llamado ‘efecto arrastre’.
Elena Gijón el pasado 1 de septiembre volvió a conversar con Julia Otero a las tres de la tarde. Elena se lamentó el pasado 10 de enero no poder dar la bienvenida a la radio a Julia ya que “por un problema técnico” llevaba un tiempo sin poder hablar con ella. ¿Problema técnico? Quien conoce el asunto sabe que cuando Julia Otero empezaba a las cuatro de la tarde Elena Gijón se encargaba del boletín informativo de esa hora acabando con una pequeña conversación entre las dos profesionales. Cuando ‘Julia en la onda’ pasó a empezar a las tres de la tarde, el tramo local entre las tres y las cuatro desapareció a nivel nacional. Pero no en Cataluña, ya que el programa deportivo que se ofrecía en esa hora pasó a emitirse de dos y media a tres, justo en el tramo informativo nacional de Elena Gijón. Así al llegar a las tres en Onda Cero se despedían dos programas: en Cataluña el informativo local con la sección de deportes y ‘Noticias Mediodía’ en el resto de las emisoras. Y seguidamente, sin paños calientes, comenzaba ‘Julia en la onda’. Bienvenidas otra vez las conversaciones entre las dos.
Y sin salir de ‘Julia en la onda’ la que ha desaparecido es la que había entre Julia Otero y Juan Ramón Lucas a eso de las 18:55. Como Lucas no está se acabó el chollo para ‘La brújula’, con lo que Rafa Latorre debe conformarse con ese ‘efecto arrastre’ de oyentes que él espera tener del programa anterior. Desde mi punto de vista ese ‘arrastre’ se consolidaría más si existiese el enlace entre Julia Otero y Rafa Latorre. En este caso no creo que haya problemas técnicos. Ellos verán. Pero en la Cadena SER sí que continúan conversando Carles Francino y Aimar Bretos en los últimos minutos de ‘La Ventana’.
Esto en lo que respecta a Onda Cero y la SER. En la Cadena COPE existe un enlace muy madrugador y que pocos deben escuchar entre Carlos Herrera y Carlos Moreno ‘El Pulpo’. El momento únicamente sirve para que el ínclito ‘líder’ de la cadena termine de dar las órdenes a su técnico de cómo debe salir su voz y cómo debe recibir lo que escucha, aunque parezca que sea un espacio musical en el que ‘El Pulpo’ propone una canción o un artista y a Herrera le da por explicar cosas sobre el tema propuesto, incluso las personales. No hay nada como darle más esplendor al ‘líder’ a pesar de que a veces parece muy resacoso. Esto me recuerda a una anécdota de Luis del Olmo que, estando en la COPE, presentó con ‘Buenos días, España, esto es Protagonistas en la Cadena Copas’. Tras la risa de los contertulios que tenía en el estudio reconoció que se acordaba más de lo que pasó la noche anterior.
En cuanto a los programas de deportes es la COPE la que desde ‘La linterna’ Ángel Expósito es el que pregunta a Juanma Castaño qué va a haber en ‘El partidazo de COPE’.
‘Efecto arrastre’. Quizás en televisión este método sea muy efectivo. Véase el caso ‘Pasapalabra’, un concurso que por ahora me abstengo de catalogar, que tiene su tirón en la audiencia televisiva. Cuando estaba en Telecinco hacía que el informativo de Pedro Piqueras, lo siguiente en la parrilla de programación, fuera lo más visto, y ahora en Antena 3 ha aupado a Vicente Vallés al primer puesto. Dicen que Piqueras no sabe qué decir desde que el ‘efecto arrastre’ lo obtiene con lo que queda del ‘Sálvame’.
De todo lo anterior quedaros con esto: no busquéis estos ratitos radiofónicos cuando están los suplentes. La categoría es la categoría.