En tiempos de dictadura es normal que los medios públicos y privados tengan que difundir una única doctrina. Bueno, lo de normal es un decir. Es algo inherente, que es inseparable, que viene unida una cosa con la otra.

Durante unos 40 años los medios de información en España estuvieron a merced de un órgano censor en los medios escritos, un informativo audiovisual único llamado No-Do que después se complementó con el Telediario, y un informativo radiofónico de obligada conexión por todas las emisoras, llamado popularmente ‘El parte’. Todo ello para ofrecer una única versión del espectro informativo existente, siempre y cuando a la cabeza pensante del momento le entrara bien por los ojos, ya que todo no estaba permitido.

Y llegó la tan ansiada democracia que conlleva lo que muchos estaban esperando: la libertad. Apareció la libertad de expresión e información, y con ello, tras una evolución de bastantes años y con redes sociales de por medio, nos han hecho llegar al punto actual donde el ansiado control por lo que se emite vuelve a estar en la palestra.

De hecho, el control ya existe en los medios públicos que siguen controlados por el estamento político. Ni con la democracia se quiso hacer el cambio. Lo de público es un decir ya que en lugar de pertenecer al pueblo pertenecen al gobierno de turno. Así se lo hicieron ver Pablo Iglesias y Carmen Calvo a Aimar Bretos el pasado 26 de septiembre en ‘El Ágora de Hora 25’. Los argumentos no dejaron de tener, desde mi punto de vista, un aire dictatorial: gobierno yo y la información que debe salir en la radio y televisión públicas la debo controlar yo. Bueno, Pablo Iglesias sí que hizo referencia al sector político al que pertenece el actual gobierno y del que debe beber RTVE. Carmen Calvo se fue por peteneras con el tema de la representación política y llegó a uno de los puntos que en período electoral ata a los medios públicos: el minutaje en los espacios informativos. Aimar Bretos defendió a sus compañeros de RTVE que, según él, tienen un buen criterio para decidir qué es información o no durante esos días. Pablo Iglesias y Carmen Calvo discreparon, el primero con una sonrisa socarrona y la segunda con el eterno control encubierto bajo la idea del respeto a la elección de los ciudadanos.

Audio de Cadena SER.

Había conseguido olvidar estos comentarios cuando el 10 de noviembre en un coloquio llamado ‘Retos de la Portavocía del Gobierno en la era de la posverdad’, menudo título tan rimbombante, la actual portavoz del gobierno Isabel Rodríguez dijo lo siguiente:

Isabel Rodríguez.

Desde mi punto de vista el gobierno lo tiene muy sencillo si quiere estar dando su versión en todos los medios: que acceda a las peticiones de entrevistas que se les realizan desde las diferentes cadenas. Lo malo es que mientras la parte perteneciente a Podemos prefiere pasearse por la Cadena SER y ‘Julia en la onda’, el resto se desperdiga como bien puede atendiendo la demanda. Bueno, no todos ya que Pedro Sánchez ha terminado atendiendo las peticiones de la Cadena SER, aunque nunca se sabe si son peticiones de un bando o del otro ya que en estos casos me acuerdo de las entrevistas conjuntas que le hacían a Jordi Pujol en TV3 cuando él quería y con los personajes que él indicaba.

Así que por mucha democracia y nueva política que se realice sigo viendo en muchos puntos la dictadura de la que todos reniegan, quizás porque no fue la suya.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.