Caliente y frío_16_9

No sé cuándo la llamada prensa rosa acabó asemejándose a la prensa amarilla. Hace bastantes años hablar de los famosos era ‘chic’, una calificación quizás muy cursi para los tiempos en los que estamos. Y eso que de tanto en cuanto alguno de estos famosos necesitado de dinero aparecía con cierta historia rocambolesca que le tenía en el candelero, no candelabro, durante un par de semanas, o lo que es lo mismo, lo que daban los programas de radio y televisión que hablaban sobre el tema.

En aquellos tiempos, y que conste que hablo de los ochenta, la televisión copaba estos espacios con ciertos programas que sí tiraban hacia el entretenimiento, como era el caso de ‘Bla, bla, bla’ que dirigía y presentaba Jesús María Amilibia, que después se pasaría a Antena 3 Radio junto a Felipe Navarro “Yale” para realizar ‘Gente simpática’ durante los dos primeros años de la cadena. La mujer de Amilibia, Ketty Kaufmann, ha hecho lo propio en Radio España y Radio Intercontinental, para acabar yéndose a la televisión donde hizo sus últimas apariciones.

La prensa del corazón ha tenido también un buen número de colaboradores en diferentes programas. Si nos fijamos en Luis del Olmo y su ‘Protagonistas’ estuvieron dos ejemplos como Jesús Mariñas y Jimmy Jiménez Arnau, precisamente dos que salieron mal del programa. Luis del Olmo acabó harto de ciertas noticias poco contrastadas de Mariñas, y de Jimmy no le gustó que no le hiciera caso ante una paz que le propuso con Norma Duval por algo de un zapatazo de unos días antes.

Si no me equivoco la única que realiza una revisión semanal a la prensa del corazón es María José Navarro en ‘Herrera en COPE’, sin olvidarme de Carmen Lomana con Cristina López Schlichting. Y ya está, al menos como sección. Como programa diario todavía perdura ‘Caliente y frío’, la idea que el periodista Álvaro Luis tuvo para Radio Intercontinental en 1975 y que en octubre de 1985 se trasladó a las noches de las 52 emisoras de la Cadena COPE. Lo de las noches ha sido su campo de acción, a eso de la medianoche.

En 1990 vuelve a Radio Intercontinental hasta los últimos días de la emisora, pero su desaparición lo único que hizo fue que saltara a otra emisora. Actualmente está en Radio Libertad de Madrid donde Álvaro Luis está acompañado de Gemma Serrano, y siguen estando cada día, aunque ahora los horarios son un poco más tempraneros. Lo de la medianoche queda un poco retirado.

Su estilo siempre ha sido el mismo, fiel al de los principios, al de la prensa rosa de los años ochenta. Quedar bien con todos y hablar de la vida profesional del famoso, que no cuesta nada. Y van 48 años, en los que la agenda y amigos/conocidos de Álvaro Luis se ha hecho grande, lo que tiene su mérito.

Quizás este tipo de programas sea considerado una rémora y que los tiempos en los que estamos necesitan de personajillos estilo ‘fast-food’, que se puedan olvidar antes que se quemen, y que vuelvan a aparecer al gusto de la cadena de televisión que necesite novedades y que el ‘famosete’ necesite dinero.

Ha sido la televisión la que se ha adueñado de mala manera de este tipo de prensa, llegándola a convertir en prensa amarilla. Repito que no sé cuándo se produjo el cambio y, lo peor de todo, cómo lo hemos llegado asumir, olvidando que han existido otros métodos, otras maneras. Precisamente las que Álvaro Luis mantiene en ‘Caliente y frío’. En un reducto estilo aldea gala de Astérix.

La prensa rosa no es lo que la televisión ha terminado convirtiendo, precisamente con algunos de los llamados periodistas del corazón que estuvieron en los años ochenta y noventa en la radio y que evolucionaron a lo que conocemos. O quizás intentaban llevarlo a ese terreno, pero no encontraban su público. Al final lo encontraron en la caja tonta, y la radio se quedó con Álvaro Luis. O quizás Álvaro Luis se quedó en la radio porque la televisión no tenía un sitio para él.

1 comentario en «Caliente y frío»

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