Ha habido bastantes personas que me han preguntado si he comenzado a utilizar eso que llaman inteligencia artificial, ya sea para crear estos textos o para grabar voz en el podcast. Pues no. Y que dure mucho tiempo, al menos para los dos temas que he comentado. Los textos los sigo haciendo yo mismo, y la voz que se escucha en este podcast y en el de ‘Terapia de un hombre … intranquilo’ es la mía. No hay nada generado por inteligencia artificial. Todo es artesanal.
Pero este nuevo campo, que aún no tiene legislación que la controle, comienza a generar muchas expectativas en algunos y temor en otros. Los primeros son básicamente todos aquellos que no viven de su voz o no quieren muchos gastos. Los segundos, el resto, los que viven de su voz. Manda cojones que me meta en este mundo de la voz en estos momentos. Ya me vale.
Existen plataformas que ofrecen audiolibros con voces de inteligencia artificial, como Appel Books o Storytel, bajo la perspectiva de bajar costes y que el oyente pueda cambiar la voz del narrador. Y no solo esto ya que durante los últimos días hemos podido comprobar como personajes mediáticos han podido hablar fluidamente en italiano o inglés mediante este sistema que alguien se ha dedicado en “educar” con sus voces para que puedan hacer lo que el usuario quiera. Con esta filosofía el mundo del doblaje tampoco se salvaría ya que se habla de traducir las voces originales y además modificar digitalmente la vocalización de los actores para adecuarla a la lengua en cuestión. De momento esto último es una idea.
¿Pero qué pasaría si la corporación RTVE empezara a utilizar la inteligencia artificial? La cosa es que ya ha comenzado a utilizarla para producir contenidos. Lo explicó Pere Vila en el programa ‘L’altra ràdio’ de Cinto Niqui de Ràdio 4.
De momento la inteligencia artificial se ha utilizado para dos cosas. La primera en las últimas elecciones municipales, cuando la corporación pública decidió realizar piezas informativas, tanto de texto como de voz, dedicadas a las poblaciones de menos de 1000 habitantes, cosa que supone unas 7000 piezas. Obviamente si eso se quiere hacer en una noche es materialmente imposible a no ser que contrates a un buen número de personas y que cada una haga unas 10 o 20 piezas a lo largo de la noche con una serie de plantillas previamente realizadas.
Para ello, y siguiendo una de las máximas que se le tiene que pedir a la inteligencia artificial, se utilizaron datos reales del escrutinio oficial que se aplicaron a textos, gráficos y comentarios sobre participación y posibles pactos, para después realizar el corte de voz con el mismo proceso.
En lo del tema de la veracidad de los datos Pere Vila puso hincapié en el otro proyecto de la corporación que es el programa de Radio 3 Extra ‘Hiperia’, disponible en RTVE Audio desde el pasado 27 de febrero, aunque no se ha generado nuevo contenido desde el pasado mes de julio.
‘Hiperia’ es el primer proyecto realizado por RTVE con inteligencia artificial y son piezas de unos dos minutos que explora el nuevo procedimiento creativo digital comparado con los medios clásicos que se han estado realizando.
No os asustéis, el programa no está realizado de forma digital por completo ya que el guion realizado a través de ChatGPT es supervisado por la guionista del espacio para revisar o verificar los más que posibles errores que pueda ocasionar el redactado digital. Una vez revisado, el texto se vuelca a una voz artificial que no termine de imitar la voz humana, que tenga cierta diferencia.
Tras saber sus aplicaciones en inteligencia artificial, me quedo más tranquilo. Pero espero que el concepto que de momento aplica RTVE no vaya mucho más allá.