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Aviso. Lo de hoy puede resultar largo. Pido paciencia.

En el ente público catalán están de celebración. Su canal generalista de radio ha cumplido los 40 años y para otoño caerán los de la televisión. Supongo que en una de esas cosas que llaman “tormenta de ideas” a los actuales directores del ente, de la radio y de la televisión se les ha ocurrido una idea, para ellos, genial: unificar la marca para sus productos. O al menos eso es lo que algunos entendemos. Así la nueva denominación será 3Cat. El 3 herencia de TV3, que en su momento se pensó utilizar este número para diferenciarse de la oferta existente de TVE1 y TVE2. Una idea que años más tarde utilizaron en Telemadrid y su abreviación a TM3, o la balear IB3 tanto en sus dos medios, pero eso es otra historia. Y para rematar el Cat, que vendría de Catalunya Ràdio.

Así el canal de televisión, tras una serie de fases establecidas, pasará a llamarse 3Cat y el de radio se abreviará a CatRàdio para en la última fase del proyecto denominarse 3Cat Ràdio, a lo más tardar en 2028. Un proceso de casi cinco años. Se lo han tomado con calma para que el público pueda digerir este proceso lo más calmado posible. Pero ya existen voces disonantes. El primero ha sido Miquel Calçada, otrora conocido con su alias ‘Mikimoto’, que ha rechazado el cambio de marca porque “no te hace más visible”. Hay que decir que tocar “los cimientos” de TV3 y Catalunya Ràdio puede suponer un gran debate mediático … a nivel catalán.

Habrá que ver hacia dónde acaba el cambio de marca, que no es el único que se avecina en los próximos meses, ya que en Catalunya Ràdio, o CatRàdio si nos ponemos modernos, quieren darles un nuevo aire a sus decaídas mañanas.

Con la celebración del 40 aniversario de la primera emisión de Catalunya Ràdio, el primer director y conductor de sus mañanas, Josep Cuní comentaba en el documental de TV3 ‘Ruta 40. Viatjant amb Catalunya Ràdio’ que cuando se le contrató la idea era hacer que la emisora fuera homologable con el resto de las cadenas que emitían en aquel momento, privadas y públicas, para hacer factible que lo que se podía explicar en castellano se podía hacer en catalán.

Josep Cuní empezó a dirigir y presentar ‘El matí de Catalunya Ràdio’ en septiembre de 1985, ejerciendo también las labores de jefe de programación. Su etapa al frente del programa matinal, en un período de asentamiento del producto, acabó en enero de 1995 cuando decide irse a Estados Unidos y toma el relevo Antoni Bassas, que estuvo al frente del programa durante 14 años consiguiendo hacérselo suyo y que al público le gustara ofreciendo el llamado “fet diferencial” en algunas de sus secciones como ‘Alguna pregunta més?’ que recogía todos aquellos extractos radiofónicos de la misma emisora y de otras cadenas que pudieran ser susceptibles de ataque a la cultura catalana. Todo bajo el estigma del humor. No hay que decir que en esta etapa se afianza en el primer lugar de audiencia.

Desde la salida de Bassas en julio de 2008 por diferencias con la dirección de la emisora, el matinal de Catalunya Ràdio ha ido rebotando en pequeños períodos que han ido confirmando el declive de audiencia que ha ido teniendo ya que con la aparición de Jordi Basté en las mañanas de RAC1 se ha hecho imposible recuperar el primer puesto de audiencia. Primero fue Neus Bonet, entre 2008 y 2009, a quien siguió Manel Fuentes entre 2009 y 2013 y que su estancia en Antena 3 TV le creó mala fama, la que le aseguró su salida. Comentario personal: mejor para él.

La siguiente fue Mònica Terribas, el azote político con sus entrevistas en la televisión autonómica catalana en su anterior etapa. Pero ni con esas consiguió que la audiencia menguara, ni tampoco con postularse a favor del referéndum del 1 de octubre sobre la independencia de Cataluña. Lo de ser más papistas que el papa a veces no funciona, como parece que le ha pasado a su sustituta, Laura Rosel, en el cargo de las mañanas desde septiembre de 2020 y que no ha conseguido remontar el número de oyentes, llegando a su dato más bajo el pasado abril con 394.000, aunque en este último de junio ha remontado a los 443.000, pero la cocina del EGM lo que te da, por un lado, te lo quita por el otro.

Así que, desde la dirección de la emisora pública catalana, han decidido acabar con la minietapa de Laura Rosel y decantarse por Ricard Ustrell, un ex de la emisora que había llevado el matinal de los fines de semana con buena resolución. De él se espera que ofrezca batalla a Jordi Basté y para eso le han dado permiso que coproduzca el programa con su productora ‘La Manchester’, y es que esto de las productoras en Cataluña tiene para otro día.

Suerte para Ricard Ustrell si su propósito es desbancar a RAC1 de las mañanas, cosa que se antoja difícil porque si en el resto de España la lucha está entre derechas e izquierdas, en Cataluña está por quién lidera el movimiento independentista. Quizás no hablar tanto del tema solucione algo, aunque me temo que lo pueda empeorar más.

Y permitidme que acabe el tema con un comentario que Neus Bonet en el documental de Catalunya Ràdio. Tras un resumen de lo que se consideraban las noticias más importantes de los años 80 sale la emisión que la emisora realizó desde la cumbre K-2, en el Himalaya, diciendo que aquello demostró la fuerza técnica de la emisora. Si la fuerza de técnica de la emisora es la contratación de una serie de satélites, sería mejor que se hablara de “esfuerzo económico”. 😉😉

1 comentario en «La batalla de las mañanas en Cataluña»

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